Coordinadores de Idiomas de ICB

Un portarretrato

Jutta Tagger, ex Directora  Editorial, ICB

 

¿Alguna vez te has preguntado cómo es posible que el Boletín Coral Internacional haga publicaciones en cuatro idiomas cada tres meses? ¿Quién está detrás de todo este trabajo? Bueno, sin el enorme ejército de voluntarios, esto sería imposible.  

Existe un coordinador para cada idioma, quien recibe todos los textos que deben ser traducidos al idioma que le corresponde. Entonces, él o ella debe encontrar a las personas dentro de la siempre cambiante fuente de personas que cuentan con el tiempo y la habilidad de traducir estos textos, que luego se deben recopilar y poner en “formato ICB”. Antes de que sean enviados a la imprenta, otra persona se ocupa de verificar el estilo, erratas, malentendidos, etc. Algunas veces, los artículos también requieren edición antes de ser traducidos, dado que muchos autores no escriben en su propia lengua. Es un trabajo grande y que requiere mucho tiempo, y estamos muy agradecidos a todas las personas involucradas en el proceso, ya que sin ellos la presentación del ICB sería menos profesional y su lectura sería más difícil.  

Hoy queremos presentar a los cuatro coordinadores. Les enviamos un corto cuestionario que han respondido de buen talante. También les pedimos que proporcionen una corta biografía y una foto.

Disfruta conocerlos y aprecia sus esfuerzos.

Aquí están las preguntas junto con sus respuestas:

 

¿Estás – o has estado – involucrado con la música, particularmente, música coral?

 

LA: Tengo formación en docencia musical. He cantado en coros casi toda mi vida, he dirigido distintos tipos de coros y aún canto en dos coros.

HB: Sí, comencé a cantar a los 11 años en el coro de mi colegio, y no he dejado de hacerlo desde entonces: la universidad Leeds UniversityNottingham Harmonic Society, los coros de las universidades de Valencia y Murcia en España, y desde mi jubilación, tres coros distintos a cargo de los europeos jubilados del norte en Costa Blanca, más el coro del pueblo en los Alpes italianos durante las vacaciones de verano.

MB: Sí, desde mi niñez hasta hoy en día. Siempre tuve dos pasiones: la música y los idiomas extranjeros. La música siempre ha sido parte de mi vida y de mi corazón. He cantado en coros casi toda mi vida. También participo en la organización de talleres de música de verano e intercambios corales. Tengo lindos recuerdos de estas experiencias y también de los festivales franceses Choralies

GFH: Mi madre tocaba muy bien el piano (aunque yo, desafortunadamente, nunca aprendí) así que se podría decir que crecí con música, no soy un profesional de la música, sino un amateur que ama por completo a la música. Luego, cuando estaba en la secundaria, la profesora de música solía transcribir varias piezas para tres voces – voces femeninas, dado que era un colegio de mujeres. Había alrededor de 750 estudiantes, ¡así que los resultados eran impresionantes! Ahora canto con un coro amateur.

 

¿Cómo comenzaste a trabajar con ICB? Y ¿desde cuándo?

 

LA: Asistí al primer Festival Europa Cantat 1961 en Passau, Alemania, como cantante. Luego, ya como presidente de la organización coral alemana “Arbeitskreis Musik in der Jugend”, me involucré con la Federación Europea de Coros de Jóvenes (fui vicepresidente por un mandato). He sido miembro de IFCM desde su fundación y he participado en su primer simposio en Viena en 1987.

HB: Un día, hace unos 12 años atrás, un joven vecino, maestro del Conservatorio, me llamó histérico para decirme que tenía una fecha de entrega de una traducción para ICB, así que me dio lástima y le hice la traducción mientras lo peinaban antes de su recital de clavicémbalo.  

MB: Mientras buscaba noticias recientes de Choralies en la web, descubrí que ICB estaba buscando coordinadores de traducciones en francés. Pensé que sería un buen desafío tras mi jubilación, vinculado con la música coral a la que me quería dedicar. Desde que fui aceptada en 2010, me siento muy contenta de realizar este trabajo, junto con sus desafíos. Me conecta permanentemente a temas de música coral de todo el mundo.

GFH: Comencé en enero de 2010: Andrea Angelini, el Director Editorial de ICB, también es director, organizador y principal inspiración detrás de la cámara coral de Carla Amori, a la que tengo el privilegio de pertenecer. Nos conocemos desde hace más de veinte años, así que cuando surgió la falta de un Coordinador de inglés, fui la elección lógica.

 

¿Cómo te comenzó a interesar la coordinación de idiomas? ¿Has tenido alguna experiencia previa con este tipo de trabajo?

 

LA: Pasé dos tercios de mi vida escolar en Inglaterra y tuve una formación bilingüe: alemán en mi hogar, inglés en todos los demás lugares. Diferentes idiomas reflejan diferentes visiones sobre un mismo tema, eso siempre me ha interesado. Antes de trabajar para ICB, yo ya realizaba traducciones para la revista Europa Cantat Magazine. Y como estudiante, en parte me ganaba la vida trabajando como intérprete simultáneo.

HB: En realidad nunca: un día que me ofrecí para realizar una traducción, Andrea Angelini dijo que necesitaban un coordinador para español, y que sería mejor que me pusiera en marcha y lo hiciera. Así que lo hice. Nunca antes había sido coordinadora, pero había sido examinadora de idiomas para la Universidad de Cambridge, así que supongo que eso me capacitaba como tal.

MB: Como mencioné anteriormente, una de mis pasiones son los idiomas extranjeros. Siempre he trabajado para organizaciones internacionales con cuestiones internacionales. Entre otras tareas, estaba a cargo de la coordinación de traducciones a cinco idiomas de actas de asambleas, resoluciones, y documentos sobre convenciones.

GFH: ¡Me interesó sólo porque Andrea me pidió que tomara el trabajo! Y no, no cuento con ninguna experiencia previa, a menos que se tenga en cuenta que fui un examinador para los exámenes ESOL de Cambridge, pero soy un buen organizador y eso lo hace más fácil.

 

¿Cuál es tu motivación? ¿Cómo valoras tu contribución a ICB?

 

LA: Mi motivación es ayudar a hacer que todos los interesantes artículos de ICB sean accesibles a las personas que no saben hablar inglés a la perfección. Así que creo que mi contribución es bastante importante.  

HB: Estoy profundamente motivada: jubilada luego de pasar muchos años en un trabajo muy demandante, considero que aun tengo algo para ofrecerle a la sociedad. Estar en contacto con tantas personas interesantes de diferentes idiomas a través de ICB es una manera placentera de contribuir.

MB: Mi motivación fue combinar mis dos pasiones durante mi período de jubilación. Este es el campo donde uno puede utilizar ambos conocimientos. También es interesante desde lo humano, trabajar con gente entusiasta con valores en común, aprender mucho sobre la música coral, y estar en contacto con músicos. Este trabajo requiere de habilidades de organización importantes, a veces no es tan fácil lograrlo. Además, la llegada de las fechas de entrega provoca mucho estrés, por ejemplo, cuando los textos no llegan a tiempo, o no hay personas disponibles para la edición. Sin embargo, es un trabajo muy placentero. Se presentan grandes desafíos mientras se está en contacto con personas que se entienden las unas a las otras a través del lenguaje universal que representa la música, pero que también se comunican en su propio idioma; entonces, nuestro trabajo contribuye a que exista un mayor entendimiento.  

GFH: Mi motivación es darle algo a los demás – y en especial a Andrea- a cambio del placer que me da cantar con el coro. En cuanto al valor de mi contribución, espero que a través de ICB ayude a mantener viva la música coral para más y más gente: cantar juntos es una experiencia genial y crea vínculos verdaderos entre personas.

 

¿Cuál es su relación con los voluntarios en su equipo?

 

LA: Yo he traducido y editado artículos para ICB por un largo tiempo, pero soy coordinadora desde las últimas dos ediciones. A través de las preguntas que los traductores tienen sobre los artículos, aprendo cada vez más sobre ellos, desafortunadamente sólo como compañeros por e-mail. ¡Pero quizá conozca a alguno de ellos en la vida real!

HB: Era un poco cautelosa al principio, porque no sabía nada sobre ninguna de las personas del equipo, ni tenía referencias de ellos. Además, cuando te comunicas en español debes ser cuidadoso, porque mientras en España hoy en día todos son muy relajados (¿demasiado relajados?) y utilizan la forma informal “tú” para conjugar los verbos, en Sudamérica aun utilizan la forma “usted”. Así que me preocupaba molestar a alguien al no elegir la forma correcta de dirigirme a ellos. Pero ahora tengo unos corresponsales realmente encantadores y afectuosos.

MB: Nuestro equipo es como una familia que tiene intereses en común. Aunque sólo nos conocemos virtualmente, mantenemos una relación muy amistosa y nos mantenemos informados aun más allá de las traducciones y el trabajo. Como ninguno tiene un interés económico en el trabajo para ICB, la motivación es sincera. Se establece una cierta forma de solidaridad para poder mejorar los textos y enviar las mejores traducciones posibles de los artículos.  

GFH: Tengo una relación muy amigable con todos mis voluntarios, y con frecuencia nos saludamos e intercambiamos noticias. En ocasiones hemos descubierto intereses e ideas en común y nos hemos convertido en –se podría decir- “amigos por correspondencia”, así que ahora nos escribimos mutuamente independientemente de la correspondencia relacionada con ICB, para compartir noticias de nuestras vidas diarias y nuestras familias (¡incluyendo a nuestros animales!). La última vez que fui a Inglaterra a visitar a mi familia, pude conocer a uno de mis “amigos por correspondencia” y pasamos juntos unas horas muy agradables. ¡Mantenerse en contacto con el equipo de voluntarios es un poco como Facebook, pero mejor!

 

¿Piensas que trabajar como voluntario es importante en la sociedad de hoy en día?

 

LA: Pienso que la sociedad actual no puede existir sin muchos voluntarios dedicados. Y vivo esto como un miembro activo de varios consejos locales, que tratan temas heterogéneos como el apoyo a organizaciones dedicadas a la música, la universidad, la comunidad judía, refugiados, comercio justo y ecología, y familias de bajo ingreso.

HB: Sí, definitivamente pienso que sí, pero noto que a veces es difícil para las organizaciones ubicarte donde tú realmente puedas usar tus talentos para el bien de la sociedad. He sido voluntaria en ONGs que no sabían qué hacer conmigo: ¿quisieras lavar las tazas de café? Bueno, ese es definitivamente un trabajo necesario, pero quizá otra persona sin habilidades específicas para ofrecer podría hacerlo. Por eso la coordinación de idiomas es ideal para mí.

MB: He trabajado como voluntaria en diferentes asociaciones. Se puede aprender mucho de tales experiencias y a veces disfrutar lo que se está haciendo es más importante que los intereses económicos. Abre el alma para conocer a otras personas con pasiones y maneras de pensar similares a las de uno. Todos los mejores momentos de mi vida están relacionados con el trabajo ad honorem con mis amigos, para poder lograr metas atractivas – la mayoría conectado con el mundo de la música.

GFH: Realmente sí – estoy involucrada en distintos tipos de trabajos voluntarios, y puedo ver la diferencia que se puede hacer. Si tienes habilidades especiales, es muy gratificante ser capaz de seguir utilizándolas aun cuando ya no las necesitas profesionalmente. Pero aun si no cuentas con habilidades especiales, hay muchas cosas que se pueden hacer: además de las cosas más obvias como ayudar a discapacitados o trabajar por caridad, puedes pasear a los perros de la perrera local, ayudar en un museo o hasta limpiar el parque local. Todo sirve para mejorar la calidad de vida, para todos.

 

Los Coordinadores

 

Alemán: Lore Auerbach (LA)

Lore AuerbachNacida en 1933 en Amsterdam/NL. Hija de refugiados políticos de Alemania, fue a Inglaterra en 1939 y regresó a Alemania en 1946. Estudió el profesorado de música e inglés para escuelas primarias y secundarias. Master en Artes Culturales y Doctorado Honorario en la universidadHildesheim University. Directora fundadora de la escuela de música Hildesheim Music school , profesora en un profesorado para maestras jardineras, miembro del Parlamento del estado federal alemán Lower Saxony. Autora de un libro y numerosos ensayos, la mayoría sobre educación musical primaria y cultura política general. Posiciones anteriores: Subintendente Honoraria de Hildesheim (cerca de Hannover), Presidente de la organización central de las asociaciones corales de Alemania, Vicepresidente del Consejo Musical Alemán.

 

Español: Helen Baines (HB)

Helen BainesNo puedo decir que sea famosa: he pasado mi vida profesional protegiendo a vuestra abuela al mantener a los adolescentes fuera de las calles. Si aprendieron algo fue de pura casualidad. Antes de jubilarme, me habían asignado la clase 1°E. Todos varones. Todos de 16 años. Uno de ellos festejaba la noche del domingo escalando la fachada de tres pisos del colegio, colándosepor la ventana de nuestra clase, apilando las mesas contra la puerta, tras llenar la cerradura de pegamento y escribir algunos comentarios en el pizarrón. Luego bajaba y me esperaba junto con 30 compañeros sonrientes en el pasillo a las 8.15 de la mañana del lunes. Yotambién ayudaba con el coro del colegio. Pero ellos no.  Llevaba de manera no oficial los ensayos por cuerdas para el coro de la Universidad de Murcia, España: hicimos el Mesias de Händel. Sopranos a las 10, Contraltos media hora después, y así sucesivamente. Martillando las notas con un dedo y pronunciando bien alto al mismo tiempo. Mira, dice “Digno es el cordero” no “dino es el correo”. Dulce, dulce… canté. Y canté. Y canté Y canté.

 

Francés: Maria Bartha (MB)

Maria BarthaLicenciatura (flauta) del Conservatorio Kodály Zoltán en Debrecen, Hungría. Diploma del estado (francés, inglés) de la academia de comercio exterior “Academy for Foreign Trade” en Budapest. Trabajó en Interkoncert en Budapest, en el departamento de opera y ballet. En Francia, cofundadora de la escuela de música Bussy-St-Georges Music School, Presidente de teatro musical para chicos en Bussy. 12 años en la asociación internacional hoteleraInternational Hotel Association, 17 años en OIV (Organización internacional de viñas y vino), una organización intergubernamental con 43 estados miembro; entre otros deberes, coordinaba 16 grupos de trabajo científico. Seguimiento de alumnos (master); también a cargo de la preparación y seguimiento de la organización internacional de competición de vinos, en colaboración con personal local.

Estudios complementarios en geopolítica, auditora de  CNAM (University for life-long learning) e IRIS, Departamento de geopolítica y asuntos internacionales, dos años de especialización en los asuntos de la Unión Europea.

 

Inglés: Gillian Forlivesi Heywood (GFH)

Gillian Forlivesi HeywoodNacida cerca de Manchester, Inglaterra. Título con honores en estudios de italiano de la universidad University of Reading. Ha vivido en Italia por muchos años, primero en Milán, donde enseñó inglés en una de las universidades más prestigiosas de la ciudad, y luego en Rimini en la Riviera Adriática. Está casada y tiene un hijo y una hija, y ¡dos gatos muy malcriados! Siempre ha trabajado como traductora, mientras sigue enseñando inglés, especialmente a profesionales; en una época tuvo su propio instituto de idiomas. Todavía disfruta de las traducciones y trabaja más que nada en el campo de la historia (especialmente historia local) y arte, frecuentemente le pagan para que traduzca materiales informativos para visitantes para exposiciones de arte. En su tiempo libre le gusta cantar en un coro amateur (un pasatiempo que comparte con su marido), ir al teatro y a conciertos, leer y coser, y tomar largas caminatas en el campo o al costado del mar. También es un miembro activo de la Universidad local de la Tercera Edad University of the Third Age. ¡Le gusta viajar y está siempre lista para empacar e irse!

 

Traducido por María Constanza Galli, Argentina

Revisado por Juan Casasbellas

Edited by Gillian Forlivesi Heywood, Italy